Hola desde mi rinconcito velero

¡Hola! Soy Sandra, y hoy os traigo una cosita que leí en Spacio Natural que hizo que me brillaran los ojitos. Se trata de cómo hacer velas aromáticas en casa, explicado con el mismo cariño con el que le das un paseo al perrete. Vamos a verlo paso a paso y como quien no quiere la cosa, veréis que se convierte en un rato de lo más gustoso.

Lo primero, y con mucha gracia, es preparar bien el espacio, teniendo a mano todos los cachivaches necesarios y creando un ambiente atractivo y cómodo. Aquí es cuando entra en acción tu toque personal para que el sitio sea chulo.

El siguiente paso importante es elegir un recipiente que te alegre la vista, donde colocaremos la mecha bien centrada, clarito que no se mueva del sitio. Una vez logrado esto, viene la parte más divertida.

Aquí toca derretir la cera, utilizando la manera clásica del baño María. La cera de soya es una opción fenomenal, ya que es sencilla de derretir y manejable. Ya en este punto, puedes añadir tu fragancia favorita, dejándote llevar por lo que más te inspira.

Con el aroma seleccionado y la cera lista, viértela despacito en el recipiente. Aquí es cuando la paciencia se convierte en virtud, al tener que dejar enfriar y solidificar. Una vez lista, cortas la mecha y si te da la gana, puedes decorar el recipiente a tu estilo.

Este vaivén de pasos se sigue con un buen rollo tremendo para que la experiencia de hacer velas caseras te llene de tranquilidad y creatividad. Sin darte cuenta, habrás pasado un ratito la mar de relajante y lleno de inspiración. ¡A darle caña a esas velas!